Entré muy campante, por el salón, era temparno. Estaba toda desubicada, mi vida a partir de entonces tomo un nuevo rumbo. Conocí ese primer día al que sería mi mejor amigo. Quién me escuchó y acompañó por 4 años, al que le recordaba sus tareas, el que me recordaba no dormir en clase. Con quien ronqué en una clase de filosofía. ¿Lo recuerdan verdad?
Ese día tambien sin saber iniciaría una amistad que no sabía que existiría, sino años después con A y L. La segunad a confesado que le caía mal por fresa y porque no me paraba la boca. Creo que eso no ha cambiado para nada. Las cosas siguen como desde el principio del origen. Ellos más felices y queriéndose.
Hoy suspiro por los tiempos que me enseñaron lo que puedo hacer, por lo que puedo luchar y que uno puede divertirse como enano en uan fuente que está enrejada, supongo que los causantes nuestra generación de Filos.
Y pues un breve recorrido por esu lugares tan excéntricos.
Los tres alegres compadres
Las reuniones bajo los árboles.
Estas noches un Cedro nos cobija en el sueño de Lily.
Quién lo diría años después: Las mejores amigas.
¡A RECORDAR SEA DICHO!
ah, ya me hiciste llorar...
ResponderEliminarlos quiero mugrosos, y los extraño porque están bien lejos y ya no los veo. bueno, ya me voy.
ANJA